BIOPHYTEX™ se utiliza en el cuidado de la piel para la reducción de las arañas vasculares, la cuperosis, las ojeras
BIOPHYTEX™ se utiliza en el cuidado de la piel para la reducción de las arañas vasculares, la cuperosis, para la reducción de las ojeras.
BIOPHYTEX contiene:
Propilenglicol , Extracto de raíz de Ruscus Aculeatus , Extracto de Centella Asiatica , Pantenol, Extracto de flor de Calendula Officinalis, Proteína de levadura hidrolizada, Extracto de Aesculus Hippocastanum (castaño de Indias) (y) Glicirrizato de amonio.
BIOPHYTEX™ LS 8740 de BASF posee propiedades fortalecedoras, suavizantes y calmantes. Se lo utiliza en el cuidado de la piel para la reducción de las arañas vasculares, la cuperosis, el cuidado de los ojos para la reducción de las ojeras y en el cuidado de la piel sensible y reactiva y productos para después del afeitado.
Ficha Técnica de BASF
El único producto tianDe, el que contiene el BIOPHYTEX™: fito-corrector 54716
¿Qué causa los vasos sanguíneos rotos en la cara?
Los vasos sanguíneos rotos en la cara son vasos sanguíneos agrandados que ocurren justo debajo de la superficie de la piel. La apariencia roja resultante en forma de red les da su nombre común, arañas vasculares.
Las arañas vasculares se encuentran comúnmente en la cara o las piernas, aunque pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo. Aparte de su apariencia, las arañas vasculares no causan ningún otro síntoma.
La genética puede hacer que algunas personas sean más propensas a tener arañas vasculares.
Los vasos sanguíneos rotos en la cara pueden desarrollarse en cualquier persona a cualquier edad, pero algunas personas pueden tener una mayor probabilidad de desarrollarlos que otras.
Algunas causas de vasos sanguíneos rotos en la cara incluyen:
Genes: las personas cuyos familiares experimentan arañas vasculares también tienen más probabilidades de tenerlas.
Exposición al sol: el daño solar puede agrandar los vasos sanguíneos y acercarlos a la piel.
Cambios en el clima: Los cambios drásticos en el clima pueden afectar la circulación en el cuerpo, causando que la piel de la cara se enrojezca. Los vasos sanguíneos pueden reventar y causar una araña vascular.
Cambios en la presión: Los cambios repentinos y extremos en la presión pueden causar la aparición de pequeños vasos sanguíneos rotos. Un estornudo o vómito excepcionalmente fuerte puede causar este cambio en la presión.
Embarazo: Los cambios hormonales durante el embarazo también pueden causar vasos sanguíneos rotos. Las arañas vasculares relacionadas con el embarazo generalmente desaparecen después del parto.
Irritantes ambientales: la exposición a ciertos químicos o contaminantes ambientales puede dañar la piel y hacer que los vasos sanguíneos sean más visibles.
Rosácea: esta es una afección común que hace que la piel se enrojezca y enrojezca debido a las venas dilatadas. Las personas con rosácea a menudo experimentan arañas vasculares.
Consumo de alcohol: El alcohol puede dilatar los vasos sanguíneos temporalmente. El consumo frecuente de alcohol puede provocar vasos sanguíneos rotos y enrojecimiento de la cara por más tiempo.
Lesiones: Las lesiones en la cabeza que causan hematomas también pueden causar vasos sanguíneos rotos. En este caso, los vasos sanguíneos a menudo sanarán como lo hace el hematoma.
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Cuperosis
Eritema, capilares dilatados, rosácea: la piel cuperosis puede ser muy molesta. Sin embargo, si está bien cuidado y, además, utilizamos los procedimientos adecuados para cerrar los capilares, puede deshacerse de los síntomas desagradables durante mucho tiempo. Una buena profilaxis es especialmente importante en invierno.
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OJERAS OSCURAS
¿Qué son las ojeras oscuras?
La piel del contorno ocular es la más fina del cuerpo –5 veces más que la del resto de la cara– y, por ello, acusa especialmente los problemas estéticos. Uno de los más comunes, tanto en personas jóvenes como en edades más avanzadas, son las ojeras, debidas a una alteración en la coloración de la piel de debajo de los ojos.
Este oscurecimiento de la zona confiere al rostro un aspecto cansado y “apagado” y, principalmente, puede estar ocasionado por.
Exceso de pigmentación (melanina), lo que confiere un color más oscuro.
Adelgazamiento de la piel, de modo que la red vascular de debajo se transparenta, y aparece una tonalidad morada.
Hundimiento en la zona que va del ojo a la mejilla (surco nasoyugal), como consecuencia del cual las ojeras todavía se evidencian más.
Aunque las ojeras suelen asociarse a la falta de sueño –factor que las agrava–, puedes notarlas en tu rostro aún teniendo un buen descanso. De hecho, hay muchas causas que pueden provocarlas y en algunas personas tienen origen genético. Es el caso de las ojeras violáceas hereditarias en algunas familias, o de las ojeras raciales pigmentadas, características de pieles más oscuras como las árabes.
En cuanto a los factores adquiridos, la exposición solar también puede provocar manchas que oscurezcan la zona. Por otro lado, ciertas patologías, como alergias o problemas de tiroides, favorecen asimismo unas ojeras más marcadas.
Las ojeras son manchas o surcos que se forman debajo de los ojos y que tienen una coloración oscura, rojiza, azulada, marrón o, incluso, amoratada. Puede que la zona esté hinchada (como una bolsa) y puede ser un rasgo facial propio de la persona, ya que puede haber una causa genética. Sin embargo, también pueden haber otros motivos. A continuación, te contamos cuáles son las causas y cómo tratarlas.
Falta de sueño, cansancio o insomnio
Al igual que los adultos, los niños también pueden tener ojeras por la falta de sueño o el cansancio. ¿Ocurrió algo durante la semana que hizo que no durmieras bien o lo suficiente? ¿Algo pasó que lo cansó más de lo habitual? Normalmente, si esta es la causa, en un par de días de descanso las ojeras habrán desaparecido por completo.
La conjuntivitis, una inflamación en el ojo, también provoca ojeras, junto a otros síntomas como la hinchazón de los párpados, el enrojecimiento de los ojos y el lagrimeo. En algunos casos, la conjuntivitis también podría tener una causa alérgica.
Otra de las causas de aparición de ojeras es la apnea obstructiva del sueño debido a hipertrofia adenoidea y/o amígdalas agrandadas que obliga a respirar por la boca mientras dormimos.
La piel de debajo de los ojos es tan delicada y sensible que podría enrojecerse con facilidad por pequeños traumatismos o roces.
Algunas personas tienen ojeras como parte de su fisionomía; es decir, constituyen un rasgo físico más, como otro cualquiera. Esto suele ocurrir cuando sus familiares directos presentan la misma característica, pues las ojeras tienen un componente genético hereditario.
Los adultos solemos recurrir a tratamientos caseros para eliminar las ojeras o, por lo menos, aclarar esa zona de la piel y reducir la hinchazón: poner rodajas de pepino o de papa frías en los ojos, lavar los ojos con manzanilla, etc. Sin embargo, no es recomendable aplicar estos trucos con los niños, ya que pueden resultar bastante molestos para ellos.
Si la causa es por cansancio, basta con lograr que el niño descanse bien por unos días para que las ojeras desaparezcan y su rostro se vea más fresco. Si se deben al insomnio, sería prudente acudir a un especialista para determinar su causa. Si consideramos que las ojeras podrían deberse a una congestión nasal (quizá crónica), también debemos acudir a un médico para determinar si el niño sufre de algún tipo de alergia respiratoria o de apnea obstructiva del sueño.
Las ojeras en niños pueden tener diversas causas y, la mayoría, tienen solución. En cualquier caso, si tenemos alguna duda y las ojeras persisten durante varios días sin que la causa sea genética o bien se acompañan de otros síntomas como fatiga constante, decaimiento, pérdida de apetito, palidez, cambios de comportamiento, es necesario consultar con el pediatra.
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Información complementaria
La información de esta hoja se proporciona solo a título informativo y de ninguna manera puede reemplazar el consejo de un profesional de la salud. Además, los nuevos trabajos pueden contradecir o complementar la información de esta hoja. En caso de duda, consulte con un profesional sanitario.
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